Pekín. El presidente chino, Xi Jinping, ensalzó la amistad entre China y Brasil durante la visita este viernes a Pekín del vicepresidente brasileño, Geraldo Alckmin, recalcando que sus lazos “van mucho más allá de las relaciones bilaterales”.
China es el primer socio comercial del país sudamericano, a quien exporta, sobre todo, semiconductores, celulares y productos farmacéuticos. En 2023, los flujos comerciales bilaterales alcanzaron los 175 mil millones de dólares, según cifras del gobierno brasileño.
Desde que volvió al poder el año pasado, el presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, llevó a cabo un delicado ejercicio de equilibrio, fortaleciendo sus lazos con China e intentando mejorar, al tiempo, las relaciones con Estados Unidos.
Tanto Brasil como China han buscado posicionarse como mediadores en el conflicto en Ucrania, rechazando sancionar a Rusia por su invasión.
“Actualmente, el mundo enfrenta unos cambios importantes que no se habían visto en un siglo”, declaró Xi a Alckmin al inicio de su reunión, en el Gran Salón del Pueblo de Pekín.
“Como países en desarrollo e importantes economías emergentes, los lazos entre China y Brasil van mucho más allá de las relaciones bilaterales y son un modelo para promover la solidaridad y la cooperación entre naciones en desarrollo, y también para la paz y la estabilidad mundial”, añadió el mandatario chino.
Por su parte, Alckmin mencionó el foro económico celebrado estos días en la capital china, en el que participaron “casi 200 empresarios brasileños”, y dijo haberse reunido con numerosas compañías chinas que operan en Brasil.
“Para nosotros, China es una inspiración”, aseguró el vicepresidente brasileño, elogiando el hecho de que cientos de millones de personas hayan salido de la pobreza en las últimas cuatro décadas en el gigante asiático y afirmando que Lula persigue un modelo de “desarrollo inclusivo”.
Se esperaba que la visita de Alckmin a Pekín allanara el camino para que Brasil se incorpore a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, un importante proyecto chino de infraestructuras.
Varios países latinoamericanos se han unido a la iniciativa, un pilar de la diplomacia del presidente Xi para expandir la influencia de China, incluyendo Argentina, Chile, Bolivia, Ecuador, Perú y Venezuela. Brasil no lo ha firmado todavía.