Buenos Aires., En una jornada histórica, el Senado votó ayer contra el cuestionado decreto de necesidad y urgencia (DNU) del pasado 20 de diciembre, considerado como anticonstitucional por la mayoría de juristas de todos los sectores políticos y que intentaba derogar ilegalmente 664 leyes y artículos de la Constitución para remplazarlas por la propia legislación del presidente ultraderechista Javier Milei, lo que significa desregulación y ajuste sin medida llevando a una situación insostenible para los más pobres y vulnerables.
En este contexto, la policía de la ciudad de Buenos Aires reprimió a golpes y con gases lacrimógenos a miles de manifestantes que se congregaron frente al cine Gaumont, a metros de la plaza del Congreso con el fin de rechazar la decisión de Milei que quitarle financiamiento al Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales, así como a todas las actividades culturales.
En su quimera de disolver el Estado, Milei está destruyendo todo lo logrado por un pueblo en las calles con su esquema de regulación violenta imponiendo un ajuste nunca visto en el país, que en sólo tres meses de gobierno aumentó la pobreza e indigencia llegando a 60 por ciento de la población. Recientemente, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia advirtió que la pobreza infantil alcanzaría a 70 por ciento de los argentinos.
Milei pretendía borrar todos los derechos adquiridos mediante sacrificios y miles de muertos y desaparecidos que quedaron en ese camino de la lucha contra una serie de dictaduras militares que marcaron la vida de los argentinos, nunca tan feroz como la última (1976-1983).
Resultaba imposible que este DNU fuera aprobado sin debate alguno de ley por ley, porque la exigencia era votarlo tal cual estaba, esperando ahora lo que suceda en la Cámara de Diputados, convocados para votarlo y luego quedaría el camino de la Corte Suprema de Justicia.
Es absolutista
Aceptar semejante derogación de leyes sin debatir es un gesto de totalitarismo absolutista sólo comparable a tiempos de la pasada dictadura militar y de las varias que le precedieron, señalaron defensores de los derechos humanos y de los pueblos.
El megadecreto fue rechazado por 42 votos contra 25 y cuatro abstenciones, en una sesión convocada por la vicepresidenta del Ejecutivo, Victoria Villarruel.
El debate fue de alto nivel, y resultó en otro revés para Milei, que, alterado visiblemente en días recientes, amenazó a los senadores mediante mensajes violentos y no se privó de advertir que gobernará sin el Congreso, e incluso sin el Poder Judicial.
Más aún, Milei aseveró en su cuenta de X, antes Twitter: “Resulta imposible interpretar esta decisión de otra manera que como un intento de socavar el ‘pacto de mayo’, el gobierno nacional y el cambio elegido por los argentinos”.
El pacto de mayo es un acuerdo de nación concebido por la administración Milei para establecer 10 políticas de Estado que permitan edificar un nuevo orden económico en el país, y reinsertándolo en el camino necesario para volver a ser una potencia mundial, según el pronunciamiento de la Presidencia.
En su texto, Milei indicó que el Senado habilitó casi 500 DNU del kirchnerismo (los gobiernos de los ex presidentes Néstor Kirchner, 2003-2007; Cristina Fernández de Kirchner, 2007-2015, y Alberto Fernández, 2019-2023).
En su discurso acerca del estado de la nación, el Presidente planteó dos alternativas: el acuerdo o la confrontación. Ha llegado el momento de que la clase política decida de qué lado de la historia quiere quedar, concluyó el mandatario ultraderechista en su comunicado.
En la tarde, mientras sesionaba el Congreso, afuera en la plaza del mismo nombre se reunieron miles de defensores del cine Gaumont, que intenta cerrar Milei y que tiene una larga historia en la vida cultural de esta capital, donde se pueden ver las películas argentinas y de nuestra región, varias ganadoras de premios o reconocimientos en el mundo.
Están dejando morir una industria que funciona muy bien y que es muy respetada y querida en todo el planeta, expuso el actor Leonardo Sbaraglia, al canal C5N.
Entre los manifestantes estaban celebridades del cine, quienes también rechazaron en las calles, el virtual desfinanciamiento del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales y todas las instituciones culturales, educativas, que Milei está dispuesto a desaparecer y, aunque la protesta transcurría pacíficamente, fueron reprimidos brutalmente por las fuerzas de seguridad enviadas por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Salvan clubes de futbol
La Cámara Federal de San Martín confirmó a su vez una medida cautelar para suspender los artículos 335 y 345 de este DNU, que permitía transformar las asociaciones civiles en sociedades anónimas deportivas, tratando de apropiarse de los clubes de futbol para venderlos al mejor postor.
Son muchas las demandas judiciales contra el DNU. Ahora decidió enviar Milei nuevamente la llamada ley ómnibus, que ya fue rechazada, y esto llevará su tiempo intentando avanzar con lo decretazos cotidianos.